Este encantador anillo es un reflejo de la belleza eterna y el compromiso duradero, combinando a la perfección el rico encanto verde de las esmeraldas con el brillo deslumbrante de los diamantes.

Este anillo consta de seis encantadoras esmeraldas, con un peso total de 0,45 quilates. Estas gemas verdes, famosas por su exuberante tono verde que simboliza el crecimiento y la renovación, aportan un aire de elegancia y vitalidad al diseño. Las esmeraldas, cuidadosamente seleccionadas por su excepcional color y claridad, son un testimonio de su inquebrantable devoción.

Acompañando a las esmeraldas hay cinco brillantes diamantes redondos blancos, con un total de 0,37 quilates. Con su notable claridad y brillo, estos diamantes añaden un toque de luminosidad que complementa el encanto de las esmeraldas. Su radiante presencia realza el diseño general del anillo, infundiéndole una sensación de sofisticación y gracia. Elaborada por expertos en brillante oro blanco de 18 quilates, la banda sirve como un lienzo atemporal para las piedras preciosas, formando una mezcla armoniosa de elegancia moderna y encanto clásico. Perfecta para usar a diario y en todas las ocasiones.

Peso total: 0,82 quilates